Una máquina expendedora despacha pan fresco las 24 horas.
El Cajero del Pan Artesano
Una máquina expendedora despacha pan fresco las 24 horas.
* La panadería repone varias veces al día las existencias de la máquina
* Dispone de un sistema que mantiene la humedad idónea para su conservación
* El despacho automático ya supone el 30% de las ventas de la panadería
No es un cajero automático. Tampoco una novedosa máquina de refrescos. Sin embargo, este singular artilugio se ha convertido en la atracción del barrio valenciano de Benimaclet. Desde hace un año expende pan artesano, las 24 horas del día, los 365 días del año.
La máquina es propiedad de PanIgnacio, una empresa familiar radicada en Galicia que, recientemente, ha dado el salto al Mediterráneo. Son sus panaderos quienes amasan el pan destinado a la ´venta automática´. Sus características son idénticas al que se despacha en la tienda. Al igual que su precio. 60 céntimos por unidad.
El éxito es tal que la expendedora se ha de reponer sus existencias varias veces al día. Es más, ya condiciona el trabajo en el obrador. Porque las 230 barras que almacena son siempre de la última hornada.
"Por la tarde, antes de cerrar, la rellenamos con una última hornada. Y de madrugada, a las 4.30, hacemos lo mismo con la primera. Nos comprometemos a que el pan esté siempre fresco", explica José Espasadín, el responsable de la tienda.
El proceso no resulta complejo, entre otros aspectos, porque el depósito conecta directamente con el horno de la panadería. Después, la tecnología hace el resto. La máquina mantiene las propiedades del pan intactas. Según Espasadín, "mantiene estable la humedad a un nivel que evita que el pan se reseque".
El 30% de las ventas diarias
El despacho ´automático´ ya representa el 30% de las ventas diarias. Y eso que la máquina sólo está operativa cuando cierra la tienda física. "Queremos seguir manteniendo el contacto directo con nuestros clientes", precisa.
Aún así, los domingos y festivos, pero también al mediodía y durante la noche, el goteo de consumidores es incesante. La mayoría son vecinos de Benimaclet, pero también representantes del sector de la hostelería.
"Nos consta que algunos restaurantes que se quedan sin pan acuden a nuestra máquina. De hecho, gracias a la expendedora nos hemos dado a conocer y ahora somos proveedores de algunos de ellos", comenta orgulloso.
La experiencia piloto se extenderá a otras panaderías del grupo en próximas fechas. Porque PanIgnacio cuenta con otras cinco máquinas expendedoras en el almacén, que irá instalando progresivamente.
Los Espasadín descubieron este ingenio técnico en una feria de la alimentación celebrada en Italia. No dudaron en adquirirla. Según su hijo Fernando, simplemente vislumbraron un cambio de hábitos: "Cada vez los horarios son más complicados y ya es difícil comprar hasta el pan. Nosotros damos servicio cuando nadie lo hace". Se parece a un cajero automático. Y vende pan.
- Fuente:
- www.elmundo.es